Nada de autorretratos, nada de paisajes, nada de cuadros famosos basados en obras de arte con mucha historia… ¡lo que hoy en día se llevan son los cuadros con formas geométricas! Un elemento decorativo con mucho poder y fuerza, y que puede encajar a la perfección en espacios como un comedor, salón o el dormitorio.
¿Qué cómo le puedes sacar partido a la decoración con cuadros de figuras geométricas? ¡Te vamos a dar unos cuantos consejos para que no cometas un solo error!
Cuadros con figuras geométricas, ¿por qué?
Ahora mismo debe estar pasando por tu cabeza la pregunta: ¿por qué debo optar por este tipo de decoración en lugar de escoger las otras que hay? Antes que nada, te preguntaremos: ¿qué tipo de decoración tiene tu casa?
Este tipo de arte llegó a las casas, entre otras cosas, porque pega a la perfección con algunos tipos de decoración, como la moderna, minimalista, nórdica o industrial. Son cuadros sencillos, fáciles de ubicar y que, además, pueden dar mucho juego.
Hay que tener en cuenta el color
A la hora de elegir un cuadro con figuras geométricas para una habitación de la casa, hay que tener en cuenta los colores que hay en este, para que no desentone con el resto de la decoración.
Lo más sencillo es escoger un cuadro con un color parecido al del tapizado del sofá, las sábanas de la cama o que, por lo menos, uno de los colores sea el mismo que el de las paredes. De este modo, cuando el cuadro este colgado, no parecerá que el cuadro sobra.
El tamaño sí que importa
Al comprar un cuadro con figuras geométricas, debes saber que el tamaño importa. No puedes comprar uno pequeño. Este tiene que ser enorme.
A fin de cuentas, la ubicación ideal para estos cuadros suele ser la pared detrás del sofá, sobre el cabecero de la cama, en un comedor… y ya sabes cómo deben ser los cuadros en estas zonas, ¿verdad? En efecto, ¡tienen que ser enormes! Así que no escatimes en este aspecto y compra el cuadro más grande.
Sin marco
Es cierto que algunos cuadros con figuras geométricas se venden con marco, pero es porque esos están basados en obras de autores famosos. A ti lo que te deben interesar son los cuadros más urbanos.
Estos no tienen marco, se cuelga únicamente el lienzo y listo. Por un lado, perfecto, ya que los lienzos son ligeros y no hace falta hacer agujero para ponerlos. Por otro lado, si el lienzo es tiene el color primario igual que la pared, parecerá que se funda con esta.
Una idea atractiva, si te apetece, es pintar el cuadro sobre la pared. Esto lo puedes hacer con pincel o comprar pequeñas pegatinas con figuras geométricas que poner en tu pared. Luego son fáciles de retirar, y cuando la gente entre en la estancia, pensarán que es un cuadro y se llevarán una sorpresa al ver que, simplemente, has puesto unas pegatinas para hacer la imagen.