Lo primero que se ve al entrar en tu casa, ¿qué es? El recibidor, ¿verdad? ¿Y a qué si lo ves muy vacío te deprimes un poco? ¡Es por eso que debes aprender a cómo decorar un recibidor con cuadros!
Aunque queda muy bonito lo de poner un espejo, un mueble, unas plantas y demás accesorios decorativos, lo que te puede ayudarte a levantar un poco el ánimo tras un duro día de trabajo es un buen cuadro. Y te vamos a explicar cómo funciona la decoración de recibidores con cuadros.
El tamaño del recibidor importa
No es lo mismo decorar un recibidor grande que uno pequeño con algunos cuadros. En uno grande, cuando entras por la puerta, hay una sensación de amplitud, mientras que en uno pequeño parece un espacio estrecho.
Claro que esto no quiere decir que se vaya a desaprovechar. Únicamente es que vas a poner los cuadros de una forma diferente. Hay que sacarle partido al espacio, tanto grande como pequeño, pero sin sobrecargarlo, para que no parezca que reduces el espacio y lo colapsas.
¿Qué tal un cuadro en lugar de un espejo?
Cuando el recibidor cuenta con un mueble justo en frente de la puerta, no se recomienda que haya un espejo que refleje esta, porque hace que toda la energía positiva de la casa se marche al abrirla.
Así que, ¿qué tal poner un gran cuadro sobre el recibidor? ¿O poner varios pequeños formando un cuadrado perfecto? Es una práctica muy usada, sobre todo, en los recibidores que son pequeños.
Un cuadro sobre el mueble del recibidor
¿Quieres tener espejo en el recibidor si o si, pero también te gustaría tener algún cuadro? Cuando el recibidor es pequeño y estrecho, cuesta mucho dar con una forma de encajar un cuadro, ¿verdad?
Pero, es que no hace falta que el cuadro esté colgado. Puedes ponerlo sobre la tabla del mueble del recibidor, apoyado en la pared, en el centro, a cada lado un par de objetos decorativos y frente a este un cuenco para dejar las llaves. Una solución rápida y sencilla.
Sobre unas baldas
De nuevo tienes especial preferencia por un espejo frente a poner unos cuadros. ¡No hay problema! Pon unas baldas a cada lado del espejo y úsalas para apoyar unos cuadros. De este modo te ahorrarás hacer agujeros y podrás tener pequeñas piezas de arte.
A cada lado del espejo
Si tienes un recibidor de gran tamaño, un mueble con un espejo te parecerá que no dice mucho. Así que tendrás que poner algunos cuadros en el recibidor.
Lo mejor es poner un par de cuadros, de un tamaño un poco más pequeño que el espejo, a cada lado de este. Así no se le roba tanto protagonismo al espejo, pero también se destacan los cuadros. Es una solución rápida y sencilla de hacer. Es más, como no serán muy grandes, se puede utilizar un cuelga fácil o cualquier otra técnica para colgar un cuadro sin hacer agujeros, porque no pesarán mucho y no necesitan un soporte tan fuerte.