¿Te gusta que tus cuadros destaquen sobre el resto de objetos de decoración? ¿Qué todo el mundo se los quede mirando cuando entran por la puerta de tu casa? ¡Lo que necesitas es comprar cuadros con luz!
Es un pequeño detalle que hará que tus piezas de arte más valiosas destaquen sobre el resto. Además, decorativamente hablando, aporta más carácter a la estancia que cualquier otra pieza de arte.
¿Cómo sacarle partido a la luz?
Existen muchas formas de sacarle partido a la luz a la hora de decorar con un cuadro con luz. Por ejemplo, puedes colgar el cuadro, poner una pequeña lamparita colgada justo encima y así esa obra será la que más destacará de toda la sala.
O bien ponerla justo debajo de un foco, para que cuando entren tus invitados se percaten de que está ahí. Otro truco que suele usar la gente, es que la luz esté en el mismo marco. De ese modo, se podrá apreciar la obra sin necesidad de encender las luces del techo. Por no hablar de que es una opción más económica que la de instalar una pequeña lámpara o tener encendido toda la noche un foco.
Cuadros con luz, ¡iluminarán tu decoración!
Y si en lugar de utilizar luz artificial para destacar una pieza, ¿esa misma pieza emitiera luz para hacerla destacar con su propio brillo? No, no nos hemos vuelto locos. En los últimos años han aparecido en los mercados lo que se conoce como cuadros con luz, los cuales tienen su propia fuente de alimentación para iluminar una parte del cuadro.
Por ejemplo, pongamos que compras un cuadro que representa un paisaje llego de claveles. Pues los pétalos de los claveles podrían iluminarse. O una versión de la noche estrellada de Van Gogh donde realmente se iluminen las estrellas. Una idea bastante original a la hora de decorar, a la vez que podría resultar bastante romántico.
No tienen por qué ser muy grandes
Dado que tu intención es que, ya sea de manera indirecta o directa, los cuadros destaquen por una luz artificial, no deberías molestarte en buscar una pieza que tenga un gran tamaño. Con una pieza pequeña, o de tamaño medio, bastará.
En cuanto a la ubicación, está claro que lo mejor es tener una sala exclusiva para este tipo de obras, o que sea tu zona de descanso, como por ejemplo la sala de estar o el despacho. No te gustará estar toda la noche con cuadro que se ilumina cuando apagas la lámpara de la mesita, ¿verdad?
¿Qué cuál es la mejor opción? Con una iluminación indirecta, tendrás que preparar una instalación previa para poder iluminar el cuadro, mientras que, con la otra, como el sistema de iluminación está ya instalado en el mismo cuadro, no tendrás que hacer nada más que colgarlo. Aquí todo depende que es lo que más te guste a ti y lo que consideres que te sale más barato. Lo único que podemos asegurarte es que, elijas la que elijas, ambas opciones quedarán geniales.
